Moscú, 23 abr (Sputnik).- Las autoridades de Rusia deportaron a un agente de la inteligencia moldava que llegó al país para recoger información sobre los planes confidenciales del Gobierno en relación con Moldavia, según comunicó el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB).
“Durante el interrogatorio con el detector de mentiras, se confirmó que Dmitri Rusnak había llegado a Rusia en misión de inteligencia. Teniendo en cuenta que el extranjero no causó daño real a la seguridad nacional, fue deportado en febrero de 2025”, señaló el FSB en un comunicado.
Rusnak, que había ingresado en Rusia en 2024, ahora tiene prohibido entrar en el país por un plazo de 60 años.
El agente moldavo, precisó el FSB, “intentó legalizarse en Rusia y debía mostrar su intención de colaborar en bienestar de nuestro país en caso de que cayera en la mira de las fuerzas de seguridad”.
Según desveló el FSB, Rusnak recibió entrenamiento especial en 2004 en un país extranjero, se hacía pasar por diplomático y mantenía contactos con el servicio de inteligencia moldavo.
En 2020, detalló el ente, el director de la inteligencia de Ucrania, Kiril Budánov, se comunicó con Rusnak para que le facilite contactar con Maia Sandu que entonces era candidata a la presidencia de Moldavia.
Budánov, a cambio, ayudaba al agente moldavo en sus proyectos comerciales en el territorio ucraniano, en particular a favor de empresas estadounidenses relacionadas con la producción de semillas.
El Gobierno de Ucrania condecoró a Rusnak por cumplir las misiones encargadas por el servicio de inteligencia de ese país.
Según información del FSB, en 2021 Rusnak participó en un encuentro entre Budánov y el responsable de la inteligencia moldava en el que se abordó los planes para sabotear unos almacenes de municiones que custodiaban los pacificadores rusos en Transnistria. (Sputnik)
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