Ereván, 8 sep (Sputnik).- El empresario Samvel Karapetián, encarcelado desde junio por criticar al primer ministro, Nikol Pashinián, desafió al Gobierno y prometió la implementación de proyectos económicos para mejorar la calidad de vida de la población del país.
En un mensaje enviado desde el centro de detención, Karapetián señaló que la población armenia no tiene la posibilidad de incluso soñar con un buen nivel de vida a causa de la política del Gobierno.
“Pese a estas graves condiciones, nosotros podemos dar rápidamente soluciones concretas y necesarias para mejorar el bienestar de nuestro pueblo”, indicó.
Según el empresario, el saldo negativo anual de la balanza comercial de Armenia ronda los 4.000 millones de dólares y esto significa que hay un gran potencial para la apertura de líneas de producción en el país y la implementación de proyectos de inversión rentables para dar trabajo a la población, en especial de las provincias.
“En corto plazo podemos captar grandes inversiones extranjeras con sus capacidades de producción, estimular a las empresas locales con programas específicos de apoyo estatal”, declaró.
Karapetián subrayó que las reformas en el sector agrario deberían ser reales y tiene que haber competencia real entre las firmas que acopian las cosechas de los agricultores para que estos puedan obtener beneficios y garantizar el bienestar de sus familias.
“Nuestra producción agraria puede ser una buena materia prima para el desarrollo de nuestra industria alimentaria. Dentro de algunos años compañías referentes internacionales deben estar presentes en Armenia y trabajar en nuestro país (…) Creo que esto y otros programas económicos en corto tiempo pueden cambiar la vida de nuestro pueblo, detener, por fin, la emigración y todos tendrán un trabajo decente”, declaró.
Karapetián, propietario del grupo empresarial Tashir, fue arrestado el 18 de junio por salir en defensa de la Iglesia Apostólica Armenia en medio de los ataques del primer ministro y ahora está acusado de “llamamiento público para derrocar al Gobierno”, una acusación tachada de absurda por la defensa del empresario.
Un día antes de su detención, Karapetián dijo a la prensa que “un pequeño grupo, que ha olvidado la historia de Armenia y los 1.000 años de historia de la Iglesia Armenia, atacó a la Iglesia y al pueblo armenio”.
Las declaraciones del empresario enfurecieron a Pashinián quien amenazó con hacer “sentir en carne propia todo el poder del Estado” a los que se expresan de esa forma.
El 14 de julio, Karapetián, desde la prisión, anunció la creación de un partido político para construir el futuro de Armenia. (Sputnik)
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