BRICSLat les desea ¡Felices Fiestas!

BRICSLat les desea ¡Felices Fiestas!

Desde BRICSLat les deseamos una Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo.
Que el 2025 nos encuentre en el camino de un mundo sin hegemonías, multipolar y solidario, transitando el camino que nos lleva a la comprensión mutua y al desarrollo compartido entre los pueblos. Es el único freno al odio y la violencia extrema que nace de la avaricia sin límites. 

En estos momentos cuando en familia expresamos cariño, esperanza, regocijo, alegría, compasión y recuerdo por los seres queridos que ya no están, creemos que es un buen momento para compartir los 5 Principios de la Fundación FIPPE.


1 – Amar la Patria en que naciste para mejorarla, cuidando y cultivando su historia y cultura.
Amar la patria es poner siempre primero a nuestro pueblo, a la familia, a los afectos, a los ancianos, a los niños. Amar la Patria es honrar todo lo que nos hace hijos dignos de una nación soberana.

2 – Conocer y entender a otras culturas para abrir la mente y el corazón al entendimiento de otros pueblos y sus creencias.
El conocimiento respetuoso de otras culturas y civilizaciones, de otras creencias y formas de entender la vida, nos alimentará el espíritu y nos permitirá tener un espejo en donde mirarnos para comprendernos mejor.

3 – Ser humildes, respetarnos como iguales, tanto como individuos, etnias, culturas y naciones.

La arrogancia y la soberbia en todas sus formas son la raíz de la violencia, del irrespeto a las personas y los pueblos. Esto mata personas y somete con crueldad a pueblos y naciones.
La humildad es la base del aprendizaje constante y el cimiento de la honestidad.


4 – Pensar de manera orgánica, tal como la naturaleza se expresa.
Para comprender mejor la dinámica del mundo y su diversidad es necesario abandonar el pensamiento predominante occidental de blancos y negros, amigos y enemigos, los nuestros y los otros. “Una ladera con luz, una ladera con sombra, una montaña”.

5 – Obrar con el ejemplo,tanto como individuos, pueblos o naciones. 
Hay que “hablar sólo de lo que se hace”, sin promesas que casi siempre son engaños premeditados para una estafa, un robo o un saqueo.