Ciudad de México, 21 nov (Sputnik).- La organización ecologista Greenpeace presentó el miércoles en México la denominada Estrategia Nacional de Democracia Energética (ENDE), con el objetivo de combatir mediante energía renovables la pobreza energética que padecen uno de cada tres hogares del país.
“La propuesta contiene temas descentralizados de energía que pueden convertirse en habilitadores de otras necesidades básicas como salud, educación o entretenimiento”, explica un informe de la organización ambientalista.
Según el reporte, la estrategia busca promover el acceso a la energía a través de energías renovables que eviten daños a la salud de las personas y el ambiente, con un enfoque social.
La ENDE busca poner foco en la dimensión social de la energía, caracterizando la pobreza energética local y cruzando esta información con el ingreso de los hogares para poder ubicar las zonas prioritarias en cuestión de necesidades de energía.
Ese enfoque permite crear un mecanismo que pueda “financiar estos sistemas para la gente que más los necesita, usando el presupuesto existente para adaptación y mitigación al cambio climático que actualmente no se usa en acciones que contribuyan a este fin”, indica el documento presentado.
La presentación estuvo acompañada por el denominado “Sonidero Solar”, que es un sistema autónomo de energía fotovoltaica formado por dos paneles solares, un inversor y una batería que ofrece hasta cuatro horas de autonomía del sistema sin luz solar.
El Sonidero cargado de energía solar ofreció música para bailar alrededor del Monumento a la Revolución Mexicana, en el aniversario del comienzo de la rebelión social de 1910, que desembocó en la Constitución de 1917, vigente hasta la fecha, con numerosas reformas.
CAMBIO CLIMÁTICO
México desempeña un papel clave a nivel mundial en el control de las emisiones de gases de efecto invernadero, contemplado en los Acuerdos de París contra el cambio climático, en vigor desde 2016, suscritos por el país norteamericano.
“Por tratarse de una economía en crecimiento, las decisiones que se tomen en materia energética deben encaminarse hacia un modelo energético con enfoque social”, señalan los ecologistas.
El país tiene muchos retos por su diversidad geográfica, y la diversidad de sus climas provoca que la crisis climática afecte de forma drástica a su población.
“La pobreza energética ha ido en aumento, con eventos meteorológicos como sequías, olas de calor e inviernos cada vez más extremos, en algunas zonas”, indica el análisis.
Pablo Ramírez, campañista de Clima y Energía de Greenpeace México, dijo en una declaración escrita que resolver la pobreza energética usando recursos que ya existen tendría varios resultados, en primer lugar, “reducir el pago de la tarifa eléctrica para cientos de hogares que ahora mismo no pueden acceder a la energía suficiente”.
En segundo lugar, permitiría generar “empleos verdes” en las comunidades donde se implemente en los diversos eslabones de la cadena de valor de los sistemas renovables: instalación, mantenimiento, supervisión e incluso es desmantelamiento de los sistemas cuando sea necesario.
El tercer objetivo de la estrategia es sanear las finanzas públicas reduciendo los subsidios a la tarifa eléctrica
En cuarto lugar, agrega, ayudaría al país al cumplimiento de compromisos internacionales adquiridos como los Objetivos de Desarrollo Sustentable y las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional, de los Acuerdos de París
Finalmente, el quinto propósito es “ayudar a la adaptación de comunidades que ya están siendo afectadas por el cambio climático”, ante una pobreza energética, que es un tipo de “carencia que no se ve”.
En países como México, donde la radiación solar es elevada, este tipo de sistemas podrían satisfacer las necesidades de energía de personas que en este momento no pueden acceder a electricidad.
También permitiría “reducir o incluso eliminar el pago por electricidad y convertirse en habilitadores de otras necesidades básicas como la educación, la salud o el entretenimiento”, termina la propuesta. (Sputnik)
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