Tel Aviv, 31 mar (Sputnik).- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha decidido nombrar al excomandante de la Armada, vicealmirante en la reserva Eli Sharvit, jefe del servicio de inteligencia interior (Shin Bet) en lugar de Ronen Bar, cuya destitución fue aprobada por el gabinete, según anunció la Oficina del primer ministro este lunes.
“El primer ministro está convencido de que Sharvit es la persona indicada para liderar al Shin Bet por un camino que perpetúe la gloriosa tradición de la organización”, afirmó el comunicado oficial.
Y agregó: “El Shin Bet es una organización con gran prestigio (…) que sufrió un grave trauma el 7 de octubre”.
Ronen Bar no ha sido relevado formalmente de su cargo, ya que el Tribunal Supremo impuso una medida cautelar para su destitución. A pesar de ella, la corte permitió a Netanyahu entrevistar a candidatos para su reemplazo.
Netanyahu entrevistó a siete, según informó la oficina del mandatario en su comunicado. La candidatura de Sharvit será revisada por un comité de investigación antes de que la decisión llegue al gabinete.
El comunicado señaló que Sharvit había liderado el diseño de las capacidades navales para defender las aguas territoriales de Israel y que supervisó operaciones complejas contra Hamás, Hizbulá e Irán.
Informes de medios israelíes, como YNet, recuerdan que Sharvit participó en protestas contra los planes de reforma judicial del gobierno de Netanyahu.
Según el mismo medio, Sharvit no sabe árabe y nunca ha estado involucrado en asuntos palestinos, aunque ha habido otros jefes del servicio sin esos conocimientos. Por ejemplo, Ami Ayalon, también excomandante de la Armada, quien fue nombrado jefe del Shin Bet en 1996 tras el asesinato del primer ministro Yitzhak Rabin.
La selección de Sharvit se produce después de que el gobierno votara a principios de este mes a favor de destituir a Bar, lo que desencadenó grandes protestas.
Netanyahu afirmó haber perdido la confianza en el jefe del Shin Bet tras la masacre de Hamás del 7 de octubre de 2023, cuando miles de terroristas irrumpieron en el sur de Israel y mataron a unas 1200 personas y secuestraron a 251, lo que desencadenó la guerra en Gaza.
Tras haberlo hecho previamente de forma anónima, Netanyahu afirmó el jueves pasado que Bar sabía varias horas antes del 7 de octubre que era probable una invasión del grupo terrorista, pero no le alertó.
“Esto es un hecho y no una conspiración”, decía un comunicado de la oficina del primer ministro, afirmando que a las 4:30 de esa mañana, “el jefe saliente del Shin Bet ya tenía claro que era probable una invasión del Estado de Israel”.
Los críticos de Netanyahu lo acusan de intentar destituir a Bar debido a la investigación en curso del Shin Bet sobre presuntos vínculos entre sus principales asesores y Catar, país que apoya a Hamás.
La fiscal general Gali Baharav Miara, a quien el gobierno también está tratando de destituir, advirtió que el despido de Bar enfrenta dificultades legales, en parte debido a la investigación en curso del Shin Bet sobre los asesores de Netanyahu.
Bar prometió permanecer en su puesto hasta el regreso de todos los rehenes de Gaza y la formación de una comisión estatal de investigación sobre la masacre de Hamás, a la que el gobierno se opone firmemente.
El próximo 8 de abril el Tribunal Supremo mantendrá una audiencia sobre las peticiones contra su despido. (Sputnik)
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