La representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) en Etiopía, Farayi Zimudzi, destacó que la iniciativa “Legado Verde” del país africano se ha convertido en un modelo para combatir los efectos del cambio climático y garantizar la seguridad alimentaria en el continente.
La funcionaria subrayó la importancia de la plantación y gestión de árboles, así como la preservación de los recursos naturales, como un legado para las futuras generaciones, según información de
ENA, socio de la red TV BRICS.
Zimudzi elogió los esfuerzos del Gobierno etíope no solo en la siembra masiva de árboles, sino también en el impulso a la plantación de frutales, que contribuyen tanto a la alimentación como a la generación de ingresos.
La representante resaltó que esta estrategia ayuda a conservar el suelo y los recursos hídricos, elementos esenciales para el desarrollo agrícola sostenible y la mejora de la calidad de vida de la población.
Al referirse al desafío continental, la representante insistió en la necesidad de mayor cooperación entre países africanos y de apoyo internacional, ya que África es una de las regiones más vulnerables al cambio climático pese a ser la que menos contribuye a sus efectos.
Desde su lanzamiento hace siete años, Etiopía ha sembrado más de 48.000 millones de árboles, consolidando así su liderazgo en la acción climática.
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