Quito, 16 nov (Sputnik).- La XXIX Cumbre Iberoamericana cerró el viernes en Ecuador sin una declaración final debido a la falta de consenso entre los participantes.
“Hay una declaración en el marco de la Cumbre Iberoamericana, no dentro de la cumbre ya que hubo unas posiciones radicales entre algunos países”, reconoció en rueda de prensa la canciller ecuatoriana, Gabriela Sommerfeld.
Sommerfeld añadió que ante las divergencias 19 países se unieron para aprobar la “Declaración de Cuenca” y otras 24 declaraciones especiales.
“Por lo tanto, sale un producto, un compromiso de acá. Adicionalmente hay 24 comunicados especiales, 25 con el que se acaba de aprobar para Haití y eso quiere decir que hay un acuerdo mayoritario de los países”, señaló la jefa de la diplomacia ecuatoriana.
Apuntó que dentro del marco de la cumbre se aprobó el programa de acción que deberá ser aplicado por los 22 países iberoamericanos en su agenda bianual.
“También es importantísimo resaltar la cooperación Sur-Sur, que esta cumbre y los países miembros apoyan para que se fortalezca. Vemos que el descenso que pudo haber tenido después de (la pandemia) de covid ha empezado a cambiar la tendencia y los países empiezan a tender más cooperación, tanto bilateral como triangular”, resaltó Sommerfeld.
Por su parte, el secretario iberoamericano, Andrés Allamand, señaló que no hubo un consenso en la declaración política, pero al igual que Sommerfeld no dio detalles de las divergencias suscitadas en una reunión a puertas cerradas.
“Es, por lo demás, el procedimiento que se utiliza habitualmente cuando se generan las situaciones como las que acabamos de describir, pero es una situación absolutamente normal, y yo les vuelvo a insistir: en esta cumbre los 22 países participaron activamente”, expresó.
Allamand dijo que hubo una “buena asistencia en general” de los participantes, y que los 22 países iberoamericanos ratificaron su pleno compromiso con la comunidad, con su trabajo y su proyección.
“Las contribuciones económicas que los países realizan a la comunidad se encuentran al día; todos los países participan en los organismos de trabajo; todos participan en la elaboración de las declaraciones, y, en consecuencia, la actividad de la comunidad en definitiva se mantiene viento en popa”, señaló.
Según la página digital de la Cumbre Iberoamericana, el evento concluyó “con importantes objetivos cumplidos, marcando una hoja de ruta sólida para la agenda de integración y cooperación regional entre los países iberoamericanos”.
La canciller ecuatoriana resaltó la aprobación de una declaración especial de ayuda Haití, y dijo que es un problema que no se puede dejar de lado y que el apoyo a ese país tiene que ser “de forma sostenible”.
En este contexto, Ecuador traspasó la Secretaría Pro Témpore de la Cumbre Iberoamericana a España, que organizará la próxima cita en 2026.
El evento en Ecuador se celebró con la presencia de apenas dos jefes de Estado, el anfitrión Daniel Noboa, y Marcelo Revelo, de Portugal; también asistieron el vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa; el jefe de Gobierno de Andorra, Xavier Espot, y el rey de España, Felipe VI. (Sputnik)
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