Seúl, 3 ene (Sputnik).- Los investigadores surcoreanos decidieron detener la ejecución de una orden de arresto contra el presidente Yoon Suk Yeol debido a la imposibilidad de hacerlo tras más de cinco horas de enfrentamiento con los guardias presidenciales, informó la agencia Yonhap.
El Tribunal del Distrito Oeste de Seúl emitió antes una orden de detención y registro de la residencia de Yoon a petición de un equipo de investigación formado por la Oficina de Investigación de la Corrupción de Altos Funcionarios (CIO), la policía y el departamento de investigación del Ministerio de Defensa.
La ejecución de la orden que comenzó este viernes a las 08.02 horas (GMT+9), contó con la participación de 150 personas, entre ellas 30 agentes de la CIO y 120 miembros de una unidad especial de policía. De ellos, 80 entraron en la residencia mientras 70 policías esperaban fuera de la misma, aunque algunos se añadieron posteriormente a la operación.
El Servicio de Seguridad Presidencial se negó a permitir que los investigadores registraran la residencia, alegando la legislación relativa a la protección del presidente y de zonas especiales como su residencia.
El enfrentamiento de los investigadores y las fuerzas del orden con el Servicio de Seguridad Presidencial y su unidad militar del Mando de Defensa de la Capital duró más de cinco horas, pero fue en vano. Se decidió detener la operación.
“Debido al enfrentamiento en curso, la ejecución de la orden de detención resultó prácticamente imposible. Temiendo por la seguridad de los agentes sobre el terreno, a las 13.30 horas decidimos poner fin a la ejecución de la orden”, informó la CIO.
La decisión sobre nuevas medidas se tomará tras su examen, agregó.
“Lamentamos profundamente la negativa del sospechoso a cumplir con los procedimientos legales”, dijeron los investigadores.
Hasta el momento la policía no ha detenido a ninguno de los presentes por obstrucción al cumplimiento del deber.
La orden de detención sigue siendo válida hasta el 6 de enero.
El pasado 3 de diciembre, Yoon decretó la ley marcial en Corea del Sur para evitar ser destituido y acusó a la oposición de simpatizar con Corea del Norte, una afirmación que las fuerzas opositoras tacharon de “ridícula”.
Yoon cerró el Parlamento, prohibió las actividades de los partidos políticos y puso los medios de comunicación bajo control de los militares.
Posteriormente, la mayoría de los diputados lograron entrar en la Asamblea Nacional y votaron a favor del levantamiento de la ley marcial, decisión que Yoon tuvo que aceptar.
El 14 de diciembre, la Asamblea Nacional apoyó la destitución de Yoon con 204 votos a favor y 85 en contra. El primer ministro de Corea del Sur, Han Duck-soo, se convirtió en el presidente interino del país.
Actualmente Yoon es investigado por presuntos delitos de traición, rebelión y abuso de poder. También están bajo investigación el ahora exministro de Defensa Kim Yong-hyun y altos mandos de las Fuerzas Armadas. (Sputnik)
ks